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FILIPINAS

El peso es la moneda oficial de Filipinas. Se divide en 100 céntimos Antes de 1967, el idioma utilizado en billetes y monedas era el inglés, y  la denominación era "peso". Poco tiempo después se utilizó el filipino, pasando a denominarse piso.
Los billetes, se imprimen en la Security Plant Complex o en la National Printing Office.
El peso fuerte, fue la moneda de curso legal de Filipinas durante los últimos años del periodo colonial español. En 1898 el peso fuerte fue sustituido por el peso revolucionario, y en 1901 se sustituyó por el peso moderno.
En 1942, las tropas japonesas introdujeron billetes para su uso en Filipinas.
También se emitieron billetes de emergencia, llamados "pesos de la guerrilla")  utilizando materiales de baja calidad, que podrían ser cambiados a pesos de plata cuando finalizase la guerra. Durante la Segunda República Filipina, apoyada por los japoneses, se prohibió la posesión de pesos de la guerrilla y se estableció un monopolio en la emisión de dinero, por lo que aquél que fuera sorprendido con pesos de la guerrilla sería arrestado. 

En 1985 hubo un cambio radical emitiendo nuevas series con diseños distintos, y añadiendo en 1987 un billete de 500 pesos, otro de 1.000 pesos en 1991, y otra denominación de 200 pesos en 2002.
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10 pesos (dominación japonesa)
En el anverso:
Monumento de Rizal en el parque de Rizal, en Manila. El monumento fue construido para conmemorar el nacionalismo filipino, en memoria de  José Rizal.(médico, escritor y héroe nacional filipino) El monumento fue inaugurado en 1913.
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2 pesos
 
En el anverso:
Jose Rizal
Por instigación de las órdenes religiosas de dominicos y franciscanos, Rizal fue acusado de asociación ilícita con otros revolucionarios. Convicto por sedición, fue condenado a ser fusilado en el paraje de Bagumbayan (ahora Parque Rizal), dentro de Manila. En la víspera de su ejecución, escribió un poema titulado Mi último adiós, así como una carta a su íntimo amigo y colaborador alemán Ferdinand Blumentritt, en la que afirmaba
Querido hermano, cuando recibas esta carta ya habré muerto; mañana a las 7 seré ejecutado, aunque no soy culpable de rebelión.
En la madrugada del 31 de diciembre asistió a una misa con Josephine Braecken, una joven belga que había decidido acompañarle durante el tiempo que había durado su destierro, y con la que contrajo entonces matrimonio. Antes de su ejecución, pidió que no se le vendaran los ojos y que le fusilaran de frente; lo primero se le concedió, pero se le negó lo segundo, por considerársele traidor. Con todo, antes de los disparos Rizal se volvió hacia el frente; caía así, mostrando convicción en su propia rectitud.
Rizal es miembro de la generación más señera de los grandes nacionalistas filipinos, junto con sus paisanos y compañeros Andrés Bonifacio y Emilio Aguinaldo. En la actualidad existe un monumento en el sitio donde Rizal cayó, modelado por el escultor suizo Richard Kissling, autor de la estatua de Guillermo Tell. En el monumento a Rizal se lee lo siguiente:
Quiero mostrar a quienes privan a la gente el derecho del patriotismo que sí sabemos como sacrificarnos a nosotros mismos por nuestros deberes y principios. La muerte no importa cuando se muere por lo que se ama: la patria y los seres queridos.
En el reverso:
Declaración de independencia de filipinas en diciembre de 1898
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 5 pesos
 
En el anverso:
Andrés Bonifacio y Castro (30 de noviembre de 1863 – 10 de mayo de 1897)  fue un líder de la revolución de las Filipinas en contra del gobierno colonial español, que fue la primera revolución en Asia contra un gobierno colonial europeo. En 1892, fundó la sociedad secreta revolucionaria el Katipunan, que más adelante se convirtió en la base del ejército revolucionario filipino.
En el reverso:
El Katipunan era una sociedad secreta fundada en las Filipinas por Andrés Bonifacio para liberar el país de los colonizadores españoles. El Katipunan conocido es realmente una versión más corta del nombre oficial, que está en tagalo: Kataas-taasang, Kagalang-galangang Katipunan ng̃ mg̃á Anak ng̃ Bayan (Kataas-taasang, Kagalang-galangang Katipunan nang mangá Anak nang Bayan -traducido más o menos como 'Suprema y Venerable Asociación de los Hijos del Pueblo' ). El Katipunan también es conocido por sus siglas, KKK (no confundir con el Ku Klux Klan). Katipunan es un término que quiere decir la sociedad, la palabra raíz del tagalo es tipon que significa recolectar. El Katipunan fue fundado después de la detención de los miembros principales de La Liga Filipina, organización fundada por el Dr. José Rizal y de la cual Andres Bonifacio fue miembro
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100 pesos 
 
En el anverso:
Manuel Roxas Acuña (1 de enero de 1892 – 15 de abril de 1948) fue el primer presidente de la República de Filipinas.
En el reverso:
Banco central de Filipinas
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MI ÚLTIMO ADIOS
Adiós, Patria adorada, región del sol querida,
perla del Mar de Oriente, nuestro perdido edén,
a darte voy, alegre, la triste, mustia vida;
y fuera más brillante, más fresca, más florida,
también por ti la diera, la diera por tu bien.


En campos de batalla, luchando con delirio,

otros te dan sus vidas, sin dudas, sin pesar.
El sitio nada importa: ciprés, laurel o lirio,
cadalso o campo abierto, combate o cruel martirio.
Lo mismo es si lo piden la Patria y el hogar.

Yo muero, cuando veo que el cielo se colora
y al fin anuncia el día, tras lóbrego capuz;
si grana necesitas, para teñir tu aurora,
¡vierte la sangre mia, derrámala en buena hora,
y dórela un reflejo de su naciente luz!

Mis sueños, cuando apenas muchacho adolescente,
mis sueños cuando joven, ya lleno de vigor,
fueron el verte un día, joya del Mar de Oriente,
secos los negros ojos, alta la tersa frente,
sin ceño, sin arrugas, sin manchas de rubor.


Ensueño de mi vida, mi ardiente vivo anhelo.

¡Salud! te grita el alma que pronto va a partir;
¡salud! ¡Ah, que es hermoso caer por darte vuelo,
morir por darte vida, morir bajo tu cielo,
y en tu encantada tierra la eternidad dormir!

Si sobre mi sepulcro vieres brotar, un día,
entre la espesa yerba, sencilla humilde flor,
acércala a tus labios y besa el alma mía,
y sienta yo en mi frente, bajo la tumba fria,
de tu ternura el soplo, de tu hálito el calor.

Deja a la luna verme, con luz tranquila y suave;
deja que el alba envíe su resplandor fugaz;
deja gemir al viento, con su murmullo grave;
y si desciende y posa sobre mi cruz un ave,
deja que el ave entone su cántico de paz.

Deja que el sol, ardiendo, las lluvias evapore
y al cielo tornen puras, con mi clamor en pos;
deja que un ser amigo mi fin temprano llore;
y en las serenas tardes, cuando por mí alguien ore,
ora también, oh patria, por mi descanso a Dios.

Ora por todos cuantos murieron sin ventura;
por cuantos padecieron tormentos sin igual;
por nuestras pobres madres, que gimen su amargura;
por huérfanos y viudas, por presos en tortura,
y ora por ti, que veas tu redención final.

Y cuando, en noche oscura, se envuelva el cementerio,
Y solos sólo muertos queden velando allí,
no turbes su reproso, no turbes el misterio:
tal vez acordes oigas de cítara o salterio;
soy yo, querida Patria, yo que te canto a tí.

Y cuando ya mi tumba, de todos olvidada,
no tenga cruz ni piedra que marquen su lugar,
deja que la are el hombre, la esparza con la azada,
y mis cenizas, antes que vuelvan a la nada,
en polvo de tu alfombra que vayan a formar.


Entonces nada importa me pongas en olvido;

tu atmósfera, tu espacio, tus valles cruzaré;
vibrante y limpia nota seré para tu oido:
aroma, luz, colores, rumor, canto, gemido,
constante repitiendo la esencia de mi fe.


Mi patria idolatrada, dolor de mis dolores,

querida Filipinas, oye el postrer adiós.
Ahí, te dejo todo: mis padres, mis amores.
Voy donde no hay esclavos, verdugos ni opresores;
donde la fe no mata, donde el que reina es Dios.

Adiós, padres y hermanos, trozos del alma mía,
amigos de la infancia, en el perdido hogar;
dad gracias, que descanso del fatigoso día;
adiós, dulce extranjera, mi amiga, mi alegría;
adiós, queridos seres. Morir es descansar.


José Rizal 

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